Estas son algunas creencias que no tienen fundamentos reales para enfrentar ese moderno escenario de la capacitación virtual. No se asuste que no es tan complicado aprender por este medio.1. Tengo que ser un experto en tecnología.
Aunque, en la actualidad, manejar un computador e interactuar en un chat o en un foro, son habilidades que se adquieren con mayor facilidad, para algunos, la interacción con la tecnología sigue siendo un tema bastante complejo.
Sin embargo, no se tiene que ser un verdadero experto para inscribirse en un programa de educación virtual. Lo que se requiere, se aprende con tutoriales escritos o videotutoriales, si se tiene una actitud positiva hacia la interacción con el PC.
2. Es más complicado conseguir un trabajo estable más adelante.
Esta concepción, que parece imperar frente a la educación presencial no tiene asidero.
La inserción en la vida laboral depende de otros factores diferentes como los criterios de oportunidad, el perfil, las competencias y el entorno socio-económico.
Quienes están familiarizados con la interacción, gestión y comunicación digital podrán tener mayores oportunidades para el teletrabajo.
3. Es más difícil acceder a un tutor o un profesor.
Al contrario, pues la interacción que se produce es constante.
En la modalidad virtual existen más posibilidades de contacto: foro, correo, chat e incluso el teléfono.
Hay académicos que sostienen que la virtualidad es más presencial que la educación tradicional, toda vez que el docente responde con criterios de inmediatez,
4. Rinde menos el tiempo.
El tiempo es flexible, en la medida en que en la modalidad virtual no se cumple con un horario establecido.
Sin embargo sí se deben dedicar una horas específicas para el estudio en cada asignatura. Esto implica que el estudiante debe ser muy organizado y disciplinado con el tiempo de estudio. Si esto no ocurre, es probable que se acumulen las actividades, por lo que se experimenta falta de tiempo.
5. No se encuentra oferta con tanta calidad.
La calidad no depende de la modalidad, sino del nivel de exigencia de las Instituciones de Educación Superior.
A esto habría que sumarle el compromiso que tenga cada estudiante con su proceso formativo, la dedicación que tenga el docente, la calidad de los diferentes materiales educativos, su actualidad, su pertinencia, y la calidad humana que promueva dicha institución.
4 hábitos altamente efectivos del alumno virtual
Alejandro Franco Jaramillo, coordinador del programa de Psicología de la Universidad Católica del Norte, comparte algunas competencias que se deben adquirir para emprender una carrera o un estudio virtual.
1. Apertura y buena disposición para participar en grupos y así compartir ideas y vivencias que enriquezcan el proceso formativo, ya que se fomenta el aprendizaje colaborativo y cooperativo.
2. Comodidad y tranquilidad, para sentirse cómodo sin tener una retroalimentación visual de sus compañeros o del profesor, ya que la mayor interacción que se da, será escrita.
3. Contar con acceso a un computador con conexión a internet.
4. Autodisciplina para llevar a cabo todas las tareas asignadas y una alta motivación para cumplir con todos los requerimientos.
Tomado de El Colombiano:
http://www.elcolombiano.com/BancoConocimiento/C/cinco_mitos_de_la_educacion_virtual/cinco_mitos_de_la_educacion_virtual.asp
